Al Sur de Italia, nacía Don Antonio Menniti, quien con tan solo dieciséis años ingresó en la Marina allí por 1938, época en que el mundo mostraba sus ideologías, vanguardias y constantes cambios, donde la segunda guerra mundial asomaba con sus costados más críticos e invitaba al mundo a involucrarse dentro de su lucha.
Su participación en la guerra se hizo notar en el cargo de Sargento 1º embarcado en submarinos donde participaba de las misiones impuestas en territorio de mares del enemigo, resolviendo con coraje y sentimiento del deber las situaciones mas arriesgadas en su embarcamiento.
Luego de la guerra en un período de recuperación para su país, donde las posibilidades eran escasas, donde se vivía una gran desesperanza, allí era el momento justo para comenzar de nuevo, cerrar heridas y conquistar nuevas fronteras.
Así fué como alrededor de los 50` inmigra, donde si bien la situación mundial no era apropiada, argentina estaba dispuesta a abrazar a una nueva generación.
Con viento a favor tardó en llegar a suelo argentino nada mas ni nada menos que 14 días en barco. De esta manera Antonio se inserta en la sociedad e ingresa a la Compañía Tranviaria Automotores de la ciudad de La Plata bajo el desempeño de “guarda” donde después de dos meses pasa a cumplir la tarea de oficial segundo electricista.
Años después decide abrir en el barrio La Loma un despacho de vino con bodega propia y a fines de los ’70 cierra dicho comercio para luego reabrirlo en otra categoría.
En el año 1972 aquellos comienzos demostraban que su oficio de electricista hoy consagraría uno de los comercios mas importantes que la ciudad tiene para ofrecer, así un nuevo destino comienza y la familia unida decide reabrir su negocio con el nombre de Electricidad La Loma en el rubro Materiales eléctricos con su justa ubicación en la calle 17 Nº 315. De esta manera hoy Electricidad La Loma cumple el rol más fuerte dentro de su área, siendo un comercio competente, enérgico, pero por sobre todas las cosas con la esencia de lo familiar.